La nocturia se caracteriza por la necesidad frecuente de levantarse durante la noche para orinar. Si bien es normal que la mayoría de las personas se despierten ocasionalmente para ir al baño, la nocturia se considera un problema cuando ocurre con frecuencia y afecta la calidad del sueño.
De acuerdo a la International Continence Society, institución que agrupa urólogos, uroginecólogos, fisioterapeutas y otros profesionales que investigan y tratan la incontinencia y más trastornos del suelo pélvico, la nocturia se define como despertarse dos o más veces durante la noche para orinar.
Causas de la nocturia
La nocturia puede ser causada por una variedad de factores, que van desde condiciones médicas subyacentes hasta hábitos de vida poco saludables. Algunas de las causas comunes incluyen:
- Problemas del tracto urinario: Infecciones del tracto urinario, inflamación de la próstata, hiperactividad de la vejiga y otros padecimientos relacionados con el sistema urinario pueden causar nocturia.
- Consumo excesivo de líquidos: Beber grandes cantidades de líquidos, especialmente cerca de la hora de acostarse, puede aumentar la producción de orina y, por lo tanto, provocar nocturia.
- Edad avanzada: Se estima que tres de cada cinco personas mayores de 70 años la padecen, aunque también se puede dar en edades más tempranas, tanto en hombres como en mujeres. A medida que las personas envejecen, es común que experimenten cambios en la función del tracto urinario, lo que puede aumentar el riesgo de nocturia.
- Enfermedades subyacentes: Afecciones como la diabetes, la insuficiencia cardíaca y la enfermedad renal pueden contribuir a la nocturia al aumentar la producción de orina o interferir con la capacidad del cuerpo para concentrar la orina durante la noche.
- Medicamentos: Algunos medicamentos, como los diuréticos y ciertas drogas para la presión arterial, pueden tener efectos secundarios que aumentan la producción de orina y contribuyen a la nocturia. Los anticolinérgicos que se usan para tratar el síndrome de vejiga hiperactiva, pueden interferir con las señales nerviosas que controlan este órgano e incrementar la frecuencia urinaria. El litio y ciertos antidepresivos, como los inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina, bloquean la acción de la hormona antidiurética y también pueden precipitar esta condición.
Impacto en el Descanso
La nocturia puede tener un impacto significativo en la calidad del sueño y, por lo tanto, en la calidad de vida. Algunos de los efectos negativos incluyen:
- Fragmentación del sueño: Levantarse repetidamente durante la noche interrumpe los ciclos normales de sueño, lo que puede llevar a una menor calidad del sueño y a una sensación de fatiga durante el día.
- Somnolencia diurna: La interrupción del sueño durante la noche puede provocar somnolencia diurna, lo que afecta la concentración, el rendimiento laboral y la capacidad para realizar actividades cotidianas.
- Impacto emocional: La falta de sueño adecuado puede afectar el estado de ánimo y contribuir a la irritabilidad, la ansiedad y la depresión.
- Riesgo de caídas: Levantarse durante la noche aumenta el riesgo de caídas, especialmente entre las personas mayores, lo que puede resultar en lesiones y complicaciones adicionales.
Gestión de la nocturia
El tratamiento de la nocturia depende de la causa subyacente. Algunas estrategias comunes incluyen:
Limitar la ingesta de líquidos por la noche: Reducir la cantidad de líquidos que se consumen de 4 a 6 horas antes de acostarse puede ayudar a disminuir la necesidad de levantarse durante la noche para orinar. También evitar el alcohol y la cafeína al atardecer, ya que podrían tener efecto diurético.
Tratar las condiciones médicas subyacentes: Es necesario atender el tratamiento de problemas médicos como la diabetes, la insuficiencia cardíaca o las infecciones del tracto urinario para reducir la nocturia.
Modificar los medicamentos: En algunos casos, cambiar y modificar los horarios de los medicamentos que pueden estar contribuyendo a la nocturia alivia el problema. Si se está consumiendo alguno de los remedios mencionados más arriba es ideal consultar con los especialistas para ajustar el tratamiento sin correr riesgos.
Ejercicios: Mantenerse activo físicamente mejora la función del tracto urinario y reduce la frecuencia de la nocturia en algunos casos. Los ejercicios de suelo pélvico y el entrenamiento de la vejiga con fisioterapeutas pueden ser útiles para enseñar a controlar mejor la micción. Si se sufre de piernas hinchadas por retención de líquidos, se recomienda elevarlas unas horas antes de acostarse a dormir.
Si experimentas nocturia con frecuencia o si afecta significativamente tu sueño y tu calidad de vida, es importante buscar orientación médica para identificar y tratar cualquier causa subyacente.